2. Transfiera archivos al sistema primario (si es necesario)
- Si el archivo es completamente seguro, puedes volver a descargarlo desde la fuente oficial (es más seguro que moverlo desde el Sandbox).
- Evite copiar y pegar directamente desde el Sandbox, ya que esta función está diseñada para el aislamiento, no para la transferencia de archivos.
3. Mantente alerta mientras corres
- Ejecute el archivo primero en el sistema principal con derechos de acceso limitados (no administrador).
- Supervise su actividad con Windows Defender o una herramienta de supervisión como el Explorador de procesos.
Si el archivo es problemático (malware o sospechoso detectado)
1. Detenga inmediatamente las pruebas
- Cierre todos los procesos relacionados en el Administrador de tareas (si aún se están ejecutando).
- Apague el espacio aislado de Windows : todos los cambios desaparecerán automáticamente.
2. Eliminar archivos del sistema principal
- Si el archivo está almacenado en Descargas u otra carpeta, elimínelo permanentemente (Mayús + Eliminar).
- Vacíe la Papelera de reciclaje para asegurarse de que el archivo se haya eliminado por completo.
3. Realizar un análisis completo del sistema
- Use el análisis sin conexión de Windows Defender (detecta de forma más eficaz el malware persistente).
- Alternativa: Utilice una herramienta como Malwarebytes o HitmanPro para realizar comprobaciones adicionales.
4. Denunciar archivos sospechosos (opcional)
- Si el archivo procede de un origen en el que se supone que es de confianza (por ejemplo, un sitio web oficial que puede haber sido secuestrado), repórtelo a Microsoft Defender SmartScreen o VirusTotal.